Dos jóvenes católicas repartiendo El Conflicto de los Siglos en la Jornada Mundial de la Juventud en Lisboa 2023

La historia detrás de esta foto es verdaderamente sorprendente. Estas dos chicas católicas participantes del evento papal de Lisboa, necesitaban algo de comida el sábado mientras compartíamos juntos. Así que unas hermanas les dieron lo que necesitaban. Después de un tiempo, volvieron donde estábamos repartiendo libros y por propia iniciativa nos preguntaron si podían ayudarnos. Los hermanos al ver su disposición y la gran multitud que pasaba sin que pudiésemos dar abasto, por supuesto dijeron que si, y les entregaron un carrito con libros. Así que aquí estaban dos jóvenes católicas repartiendo el Conflicto de los Siglos a otros católicos durante mas de dos horas. Y he de decir que con mucho éxito, puesto que llevaban las credenciales del evento, y muchos aceptaron el libro. Estuvieron más de dos horas trabajando.

Mientras tanto, la Unión Adventista Portuguesa prohibió vehementemente (como si tuviera la potestad de hacerlo) a todos los miembros que participaran en esta acción, por considerarla «una provocación hacia sus hermanos los católicos». Como resultado de esto, casi la totalidad de los miembros adventistas se mantuvieron lejos de esta actividad, y tampoco nos dieron alojamiento en sus casas, salvo aisladas excepciones. El contraste es evidente: mientras los obreros que Dios ha bendecido con un precioso mensaje obedecen a los hombres antes que a Dios, callándose en tiempo de crisis y enterrando su talento, Dios levanta piedras y hace que hablen en el lugar de éstos de las formas más sorprendentes e inimaginables. Sea como fuere, la obra se va a hacer, porque Dios es el que la dirige, y no ha habido día de esta semana que no haya sido notoria Su intervención. Que participemos de esta gran comisión no es algo que El necesite, sino que es un privilegio que Él nos otorga, por el gran amor que nos tiene. 

Nosotros no podemos entender el eterno gozo de las edades venideras que nos provocará un solo alma que hayamos traído a Cristo mediante la entrega de un libro o un testimonio. Mas de Cristo y menos de nosotros, mas misión y menos peleas entre hermanos, mas evangelismo y menos calentamiento de bancos en la iglesia, mas comida sólida y menos leche para bebés, mas verdad presente y menos mensajes diluidos que no llevan a la búsqueda de la santidad, sino todo lo contrario. El mundo necesita un fuerte pregón. ¿Quién quiere tener el privilegio de darlo? «¿A quién enviaré, y quién irá por nosotros? (Isaías 6:8)

«El Señor Jesús toma a las personas que sabe que se dejarán moldear y las emplea para dar gloria a su nombre, para que satisfagan su propia concepción espiritual. Emplea material que otros desecharían y trabaja con todos los que permiten que lo haga. Una puerta se abre en el cielo accionada por medios muy sencillos, y Dios usa la sencillez del agente humano para revelarse a los hombres.» 6TPI 443.1

Es mi deseo y oración que estas jóvenes lean, entiendan y abran los ojos a la realidad que nos rodea, entreguen sus vidas a Cristo, y puedan disfrutar del fruto de su labor por las edades eternas. Que el Espíritu de Dios, único y verdadero sustituto de Cristo en esta tierra, y la Biblia sean su guía y norma de fé, por encima de todo mandato humano, Amén.